La nata le da un sabor suave y ligero a este arroz meloso, y mezclada con el parmesano en polvo lo envuelve para darle una textura parecida a la del risotto, pero con un matiz: el grano es largo, asi el arroz queda siempre entero.
A cada golpe de tenedor, irás descubriendo trozos de tiernas setas con un tamaño que quizá te sorprenda. ¡Ah! y nuestros cocineros te dejarán la cabeza de alguna de ellas entera por si quieres marcarte un tanto con la presentación... o darle un bocado y ver lo bien que combina con la nata y el queso.